Maullidos Urbanos / El irreal país de López Obrador
Gato de Barrio
Ante la actual pandemia de Covid-19 y bajo el reiterado argumento de que tiene otros datos, el presidente Andrés Manuel López Obrador tiene una visión de un México muy diferente a lo que la realidad demuestra no solo cada día, sino a cada momento.
Durante su conferencia mañanera del lunes, el político tabasqueño aseguró que de acuerdo con las proyecciones que tiene su gobierno, “ya vamos de salida” de la etapa más crítica de la pandemia, pero exhortó a los ciudadanos a no relajar las medidas de prevención cuando éstos esperan recibir cualquier mínima señal para terminar con el confinamiento.
Aunque la semana pasada se registraron cifras récord en contagios y decesos por coronavirus, recordó que en esta, la que debería ser la última semana de la Jornada Nacional de Sana Distancia, se definirá el camino a seguir hacia la nueva normalidad en rubros como regreso a clases, reactivación de la economía, así como esparcimiento y actividades deportivas.
Según sus proyecciones “ya vamos de salida” de la etapa más crítica de la pandemia aunque convocó a los ciudadanos a no relajar las medidas de prevención. Agregó: “Vamos a seguirnos preparando para el reinicio de las actividades productivas, impulsar la actividad económica con cuidado para que no tengamos problemas posteriores, siempre apegados a los protocolos de salud, pero ya se va a ir abriendo el país a la industria de la construcción, a las actividades mineras, a la industria automotriz que está vinculada a Estados Unidos a Canadá y desde luego lo que tiene que ver con el esparcimiento la actividad deportiva, el regreso poco a poco a la nueva normalidad, eso lo vamos a ir definiendo en esta semana”.
La realidad es que el coronavirus avanza, la dichosa curva sigue en ascenso, sin aplanarse, pero mientras algunas personas necesitan salir de sus confinamientos por múltiples razones, como trabajar para llevar comida a su casa, otros desean reunirse con familiares y amistades, regresar a sus actividades recreativas y cuando escuchan las positivas versiones oficiales y están listos desean atenderlas aunque hayan sido fallidas, por ejemplo desde fines de abril, cuando se afirmó en ese entonces que la pandemia “ya estaba domada”.
Resultará difícil que antes de iniciar junio se aplane la curva de contagios y decesos y para poder alcanzar ese objetivo será necesario mantener el confinamiento y salir solamente por necesidades extrema y con todas las medidas preventivas posibles.
La realidad dicta que el coronavirus avanza, sin importar declaraciones que pintan un agradable y feliz futuro a muy corto plazo, impulsadas por un político ansioso de salir a sus giras pero sin cumplir con las recomendaciones sanitarias, para dar el banderazo de inicio de sus “importantes” proyectos de infraestructura para satisfacer su ego.