Gato de Barrio /
Regularmente, cuando está por finalizar el año, chamanes, brujos, adivinos y personajes similares empiezan a formular sus pronósticos para el siguiente, donde de forma general auguran la muerte de celebridades –artistas, deportistas, políticos–, hechos catastróficos en varias partes del mundo, la caída de un gobierno, en fin, hechos que constantemente suceden, y no resulta necesario tener una bola de cristal para esperar que estos hechos se cumplan.
Pero ahora lo novedoso es que la tecnología ya participa en la elaboración de estos augurios, aunque encaminados más a los cambios que sucederán en las diferentes sociedades de aquí a, al menos, a los próximos diez años.
De esta forma organismos como la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la NASA y empresas de Inteligencia Artificial (IA), coinciden al considerar que la adopción masiva de este tipo de asistencia impulsará una vida cada vez más conectada, ciudades menos saturadas y sistemas de salud más predictivos, aunque también existen retos por superar.
De esta forma, la aceleración tecnológica redefinirá la vida cotidiana a una mayor donde la IA, los vehículos autónomos y la exploración espacial ya no serán promesas, sino hechos reales que modificarán la forma de cómo vivimos, trabajamos y nos movemos, en ámbitos que van desde la salud hasta la movilidad urbana y se anticipa una década marcada por la automatización, eficiencia y nuevas oportunidades laborales, pero también se deberán enfrentar situaciones como la desigualdad digital, la ciberseguridad y nuevas habilidades profesionales.
Ante ello. lo que se esperaría para 2025-2027 sería la traducción en tiempo real, pagos digitales masivos donde el 80% de las transacciones serán globales; baterías que durarían días; primeros robotaxis en ciudades grandes y el turismo espacial crecería 40% anualmente.
Del 2028 al 2030 la esperanza de vida rozará los 85 años mundialmente; la población bajará en países desarrollados; la IA reemplazará al 30% de tareas repetitivas; los robots domésticos estarán en 20% de los hogares, además se espera surja el primer billonario.
Para el lapso 2031-2035 se espera que los vehículos autónomos conformarán el 50% de flotas urbanas; habrá misiones humanas a Marte; gracias a los datos orbitales se optimizarán los climas; existirán robots en 50% de hogares; iniciará el declive poblacional global, con el pico máximo en 10.3 mil millones de personas.
Por último, para más allá de 2035 se espera que la vida cercana a los cien años sea común; la sociedad sería 100% digital; el turismo espacial resultará «normal» para los integrantes de la alta élite social; la IA será considerada como el principal «compañero» para el 20% de adultos solitarios.
En fin, esperemos que estos augurios dejen de ser temas de la ciencia ficción para que resulten no solo ciertos, también cotidianos y beneficien a la mayor cantidad de personas en todo el mundo. Ese resultaría ser el verdadero progreso para la humanidad y solo el tiempo nos podrá decir que tan acertados fueron todos estos pronósticos.








































