ALEBRIJES EN CUADRATINES: EL FUTURO DE LAS CONSULTAS

Adrián Chavarría Espinosa

 

Como parte de la Reforma Política se abrió la posibilidad de hacer consultas ciudadanas sobre temas que, aparentemente, deben ser considerados por los legisladores bajo el requisito de recabar más de un millón 605 mil 120 firmas, que representan el 2% de la lista nominal, necesarias para aplicar esa medida en la jornada electoral programada para el primer domingo de junio del próximo año.

            Pero en estos momentos, aunque parece moda política, considero que las propuestas serán utilizadas por cada partido o corriente para, desde estos momentos desarrollar campañas electorales encubiertas y genéricas, donde se impulsarán sus propuestas mediante propaganda y de destacados militantes, muchos de ellos dispuestos a sacrificarse en pos de algún cargo de elección popular.

            Al ver los temas muy probablemente se podría anticipar una respuesta positiva por lo menos en dos temas, pero el problema sería cómo ejecutar uno de ellos. Primero está el caso del salario mínimo, tema impulsado por un lado por el jefe de gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera, y por el otro Gustavo Madero, actual líder nacional del Partido Acción Nacional.

            (Un punto que no debe descartarse desde estos momentos por parte del dirigente blanquiazul, que además de la campaña política encubierta –que por cuestiones legales nadie debería desarrollar-, también forma parte de una aspiración personal a un poco más largo tiempo: ser el candidato presidencial de su instituto en el 2018, motivo por el cual ya empieza a moverse para ser considerado, primero por sus militantes y después por la ciudadanía).

            La verdad quién no estaría deseoso de ganar un mayor sueldo en sus actividades laborales, lo que muy probablemente no podría aplicarse ya que en esa decisión intervienen varios factores económicos por considerarse a fin de no repercutir negativamente en otros indicadores.

            Según el mandatario capitalino, en el Distrito Federal serían las propias autoridades quienes financiarían parte del incremento salarial con recursos propios –es decir, el erario público-, por lo cual los empresarios no serían afectados. Desde mi punto de vista parece ser una medida populista, sin más futuro también por parte de Mancera que poder ser considerado como el abanderado de la izquierda en el 2018.

            La segunda consulta es la ya multicitada por la izquierda –PRD y el Movimiento de Regeneración Nacional, es decir Andrés Manuel López Obrador-, para echar atrás la Reforma Energética ya aprobada por el Congreso Federal.

            Aquí, además de alcanzar las firmas necesarias para ser consideradas factible la consulta en las elecciones, también se debe conocer la opinión del Tribunal Superior de Justicia de la Nación, para que dictamine si es legalmente procedente o no tal consulta. Lo que se puede anticipar es que si el resultado le es adverso a la izquierda, por lo menos ganará una nueva bandera político-electoral.

            La tercera y hasta el momento última consulta es la anunciada por el Partido Revolucionario Institucional, donde la cuestión es que la ciudadanía exprese si estaría de acuerdo en reducir de 200 a 100 los diputados plurinominales y de 64 a 32 los senadores plurinominales.

            Esta idea no es nueva, debe recordarse que fue una promesa de campaña del actual presidente Enrique Peña Nieto, la cual no fructificó en la llamada Reforma Política, pero ahora el PRI la revive como una forma de no quedarse atrás en la materia de consultas.

            En este caso, sin necesidad de ser adivino, creo que la respuesta será favorable para reducir el número de miembros del Congreso Federal, por lo cual es un tema que lleva las de ganar ya que grandes sectores sociales han expresado su inconformidad por el exceso de legisladores, a quienes en muchas ocasiones se les recuerda más por sus escándalos personales que por su labor como diputado o senador.

            Sin embargo falta un punto por aclarar: ¿qué pasará si es que las encuestas reciben el voto favorable? Creo que faltó instrumentar la segunda parte del proceso de las consultas. En el caso de las propuestas ¿se meterá reversa en la Reforma Energética, se tendrá que aumentar los salarios por decreto, acción que afectaría a la sensible economía nacional, los legisladores tendrán que reducir el número de sus compañeros?

            Siento que será labor de los legisladores federales reglamentar cómo se debe proceder con las consultas, ya sean sus resultados positivos o negativos, y deben definirse las alternativas antes de ser aplicadas las preguntas, de caso contrario serán inútiles y pasarán, como sucede con gran cantidad de iniciativas legales que quedan sin discutir y, como dicen en las Cámaras, van a la congeladora a acumularse en los expedientes pendientes.

            Esperemos que no suceda así con las consultas, de lo contrario será un punto más para que crezca la desconfianza ciudadana a todo el sistema político mexicano, en especial a los legisladores y partidos políticos.

Para comentarios ache57@yahoo.com.mx

Sé el primero en comentar

Dejar una contestacion

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.


*


Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.